Uno de los temas que me interesa mucho y que siempre he querido promover dentro y fuera de mi vida profesional es la importancia de construir economías sustentables, es decir trabajar juntos en establecer economías locales que sean económica y ambientalmente responsables. Para entenderlo mejor, el crecimiento económico sostenible es el desarrollo económico que intenta satisfacer las necesidades de los humanos, pero de una manera que sustenta los recursos naturales para las generaciones futuras.
Ahora, ante a esta crisis que enfrentamos, el tema es más fuerte que antes. La pandemia de COVID-19 es ante todo una crisis humanitaria y los esfuerzos para contener el virus y apoyar a los afectados son de suma prioridad. Como empresarios, tenemos también la responsabilidad de evaluar cómo la pandemia impactará en el futuro del desarrollo sostenible y que podemos hacer nosotros para contrarrestar este impacto.
La realidad es que en general se tiene un concepto erróneo de lo que significa “sostenibilidad” y se lo atribuye únicamente a reducir las emisiones de carbono, proteger el medio ambiente, etc. Pero la sostenibilidad va más allá, por supuesto busca proteger nuestro medio ambiente natural, la salud humana y ecológica, pero también es un gran impulsador de la innovación. Pienso que uno de los objetivos es que las empresas manejen la innovación bajo estructuras sostenibles a nivel social, ambiental y económico. Para innovar se requiere liderazgo y estructura; debemos generar innovación a través de valor sustentable.
Si bien muchos economistas no están de acuerdo sobre la importancia del medio ambiente con respecto a la actividad económica, creo que la mayoría de los empresarios coincidimos en algunos conceptos. Por ejemplo, el hecho de que la extracción de los recursos naturales, así como la contaminación son causados ??por actividades económicas. Y que la comercialización y toda estrategia de negocio deben estar conectadas a la sostenibilidad ambiental o social.
También es importante entender que muchos de los costos del daño creado por las actividades económicas tienen un impacto muy negativo en personas que no obtienen los beneficios de la actividad económica ni aceptan pagar los costos relacionados con ella. La buena noticia es que a medida que las mejores prácticas de sostenibilidad se adoptan, las empresas, tanto pequeñas como ya establecidas, están acelerando un cambio muy grande.
Una economía verdaderamente sostenible se verá diferente dependiendo de su industria. En la agricultura, significará la eliminación de la pobreza en las comunidades de pequeños agricultores, para las compañías de automóviles probablemente signifique una adopción total de vehículos con energía solar. En cuanto a finanzas, esperamos que los emprendedores implementen consideraciones ambientales y sociales en sus inversiones.
Es un hecho que la promoción e implementación de principios y estándares de conducta empresarial responsable puede ayudar a crear un entorno de inversión que se base en el respeto a los principios sociales y ambientales aceptados. La actual crisis de coronavirus ha amplificado exponencialmente la demanda de una infraestructura resistente que pueda operar efectivamente durante los momentos difíciles. Esto significa una gran oportunidad para que el mundo empresarial busque, de ahora en adelante, proporcionar infraestructura que sea sostenible, tecnológicamente avanzada y sólida.
Siguiendo estas líneas, PayPal tomó medidas para abordar el impacto de la pandemia global del COVID-19. Entre las más importantes decisiones está la de ayudar a más de 24 millones de comercios afectados por el COVID-19.
Tenemos como prioridad ayudar a los más vulnerables en esta crisis. Nuestro objetivo es promover la inclusión financiera al facilitar transacciones mediante teléfonos móviles, incluso a personas sin una cuenta bancaria. Los pagos digitales representan un gran apoyo en medio de esta pandemia y a la vez son un paso muy grande en lograr economías sustentables. Debemos trabajar juntos ahora para preparar el escenario para una recuperación que construya una economía más sostenible, inclusiva y equitativa.