Autor: Gerardo Melgoza, director general para México y América Central de SonicWALL.
Datos profesionales y personales se mezclan en nuestros equipos laborales y domésticos y ambos son importantes para nosotros.
Aunque la primera reacción ante la posible pérdida de datos pueda ser el pánico, no debemos sucumbir a él, pues aunque hasta hace poco la mayoría de las pérdidas de datos no se consideraban recuperables, actualmente, conociendo los pasos que se deben dar, suelen ser situaciones reversibles.
Para no hacer de las pérdidas de información una situación irreversible, es necesario tomar una serie de medidas de precaución que, en el caso de las empresas, va más allá y se convierte en una política preventiva frente a este tipo de sucesos que permitan la continuidad de los negocios.
Y no exageramos al decir continuidad, puesto que nadie pone ya en duda que la perdida de datos puede ser terrible para una organización, ya que puede incapacitar el acceso a la información, impidiendo su funcionamiento, paralizando su negocio o provocando pérdidas de productividad.
Así las cosas, cada vez es más habitual en las empresas, principalmente en las grandes corporaciones, la incorporación en los procedimientos de gestión de crisis y en los planes de contingencia, los protocolos de recuperación de datos, basados en recursos internos y en especialistas externos.
Causas de pérdidas de datos
Aunque la información puede “desaparecer” por múltiples motivos, no sólo por fallos del sistema o el hardware, fallos en el software, virus informáticos, errores humanos o desastres naturales, todos ellos se pueden resumir en:
- Falta de acceso debida a un fallo físico, donde alguna de las partes que integran ese dispositivo de almacenamiento ha fallado
- Falta de acceso debida a un fallo lógico, donde el problema reside en los datos en sí mismos
No obstante más del 75% de las pérdidas irremediables de datos que sufren las empresas, se deben a causas relacionadas con la intervención humana directa. Entre un 50% y un 55% de esas pérdidas se deben a errores humanos de operación y entre el 19 y el 24% se imputan a sabotajes, hackers o acciones fraudulentas. El resto, en menor medida, se debe a desastres como incendios e inundaciones y problemas técnicos hardware o software.
Tanto las empresas grandes como las pequeñas han ido evolucionando y trabajan en un entorno altamente interactivo que depende completamente de la tecnología y en el que las redes son indispensables. Esta actividad incesante multiplica el riesgo de pérdida de datos, convirtiéndolo en una amenaza constante. No sólo los virus, gusanos y hackers, sino también los errores humanos, la corrupción de datos, los fallos del sistema y las pérdidas físicas pueden destruir los datos en cualquier momento.
Recomendaciones básicas
Por ello, antes de tener que lamentar la pérdida de información, se pueden tomar una serie de medidas que, si bien no pueden evitar algunos de estos incidentes, si pueden prevenir algunos de ellos.
Como elemento fundamental se encuentra el mantenimiento periódico del sistema utilizando una herramienta de diagnóstico de disco para valorar de forma rápida la salud del mismo, de las estructuras de archivos y la memoria de la red. Ante todo no debemos perder la calma, confirmar la pérdida, analizarla y valorarla, asegurándonos de la información que necesitamos recuperar.
Una copia de seguridad es fiable en la medida en que es capaz de restaurar datos y aplicaciones empresariales cuando más se necesitan. Por ejemplo existe la serie Continuous Data Protection (CDP) ofrece la única solución completa de copia de seguridad y restauración sobre todo para el segmento de las pequeñas y medianas empresas (PyMEs).
CDP sustituye de los sistemas basados en cinta al ofrecer protección constante, intuitiva e infalible. Es una solución, que además de ser fácil de administrar, ofrece una protección completa.
El 75% de las PyMEs utilizan sistemas obsoletos basados en cinta. Las cintas requieren intervención manual, no recuperan los datos instantáneamente y suelen ser sensibles a fallos humanos.
Qué hacer antes del desastre
Cuando la pérdida ya es un hecho, empresas y profesionales pueden optar entre intentar funcionar sin los datos, procurar recuperarlos de una copia de seguridad, o contratar a una empresa de recuperación para intentar rescatar los archivos perdidos.
Para aquellas empresas que intentan seguir adelante sin los datos críticos, las posibilidades de supervivencia son escasas: según la consultora Gartner, aproximadamente el 50% de las empresas pequeñas y medianas que experimentan pérdidas importantes de datos con una duración de mas de 24 horas, entran en quiebra.
No obstante, como medida preventiva, los sistemas CDP son en la actualidad los más avanzados para hacer frente a este tipo de contingencias.
Excelente articulo!