Samsung ha vendido solamente 2,4 millones de tabletas en todo el mundo,una cifra muy pequeña en comparación con los 17 millones de iPads de Apple. Sin embargo, la guerra entre estos dos gigantes que se compiten a como de lugar el primer puesto, no solo se da en los juzgados, también en el mercado. Ayer la surcoreana mostró su nueva tablet, la Galaxy Note 10.1 en el mercado estadounidense.
La tablet tiene, como se suponía, sistema operativo Android de Google; una pantalla de 25,6 centímetros, unas 10,1 pulgadas. Además, cuenta con un procesador de cuatro núcleos y una memoria de 2 gigabytes. El precio en los Estados Unidos varía dependiendo que capacidad tiene, el de 16 GB cuesta US $ 500, y 32 GB de memoria US $ 550.
Lo novedoso de la Galaxy Note 10.1 es que ahora cuenta con el “Pen S” un lápiz óptico utilizado como un lápiz común y corriente o como un mouse. Según expresó Shoneel Kolhatkar, director de estrategia de productos de Samsung en los Estados Unidos, en la presentación del dispositivo en el país norteamericano: “Si usted no desea utilizar el Pen S, no está obligado, pero es realmente el corazón y el alma del equipo. Además, con el dedo uno no sabe muy bien si se hizo clic en el enlace, en cambio el Pen S permite una mayor precisión y control”.