La división de Toshiba America Information Systems, Inc., anunció oficialmente el nombramiento de Juan Antonio Cabrales como nuevo Gerente de Territorio para Centroamérica, Panamá y Miami.
Cabrales se incorporó al equipo de Toshiba a inicios del 2014 para asumir el liderazgo en las operaciones de comercialización, mercadeo, desarrollo de negocios y alianzas en la región. Posee una sólida formación académica en las áreas de Administración de Negocios, Mercadeo y Gerencia, y tiene a su favor una extensa trayectoria profesional de más de 17 años al frente de cargos gerenciales en compañías tecnológicas líderes a nivel mundial y en empresas dominantes del mercado minorista en Centroamérica.
“Nos proponemos no solo llevar al mercado los equipos tecnológicamente más avanzados, sino poner a disposición una mayor diversidad de opciones para toda necesidad y presupuesto. Incrementaremos la variedad de modelos en todos en todos los segmentos de mercado (corporativo, gobierno, PyMES, hogar) con precios cada vez más competitivos, sin sacrificar calidad. Nuestros usuarios pueden hoy encontrar equipos de entrada Toshiba con precios que inician desde los $120 en tablets y desde $320 en notebooks y con valores agregados en software originalmente pensados para la línea corporativa”, dijo Cabrales.
“Impulsaremos el crecimiento de Toshiba a través de nuestros principales socios tradicionales y trabajaremos decididamente en la búsqueda alianzas con empresas telefónicas líderes. Nos enfocaremos, también, en concretar nuevos acuerdos de compra directa con importantes cadenas de venta al detalle a nivel regional y en afianzar el compromiso con nuestro canal de distribución para dinamizar su crecimiento en el istmo” añadió.
El ejecutivo expresó que dará impulso a una agresiva campaña de posicionamiento orientada a destacar las fortalezas de Toshiba como principal marca de vanguardia en el mercado de equipos de cómputo y como la mejor alternativa de compra para el usuario centroamericano, por sus políticas de garantía y de soporte técnico consideradas las mejores del istmo y por los más estrictos estándares de calidad implementados en su proceso de manufactura, que le atribuyen hoy el privilegio de tener el menor índice de error de la industria.