Un reporte canadiense cuenta como tras la negativa del nuevo CEO Blackberry, se truncó una propuesta que venía madurándose desde hace dos años, entre Directivos de la canadiense y empresarios Chinos.
El informe afirma que en el 2010 agonizante BlackBerry diseñó una agresivo plan para capturar el mercado de teléfonos inteligentes de China a través de un tratado Joint Venture, pero a pesar de interés por parte de Beijing, luchas internas en la compañía, terminaron echando por tierra a un acuerdo.
Durante el verano de 2010, la Co-CEO de Research In Motion, Barbara Stymiest y Jim Balsillie volcaron su mirada hacia China Investment Corp estatal (CIC), de acuerdo con un informe en el Globe and Mail de Canadá, quienes fueron las “personas encargadas con las negociaciones”.
Posteriormente, Una nueva empresa – conformada por RIM, CIC y otros reproductores de teléfonos domésticos desconocidos, ya habrían vendido nuevos dispositivos con la licencia para ejecutar el “programa operativo” de RIM.
El acuerdo parecía haber sido aprobado por RIM como el proveedor oficial de sistemas operativos de teléfonos inteligentes en el mercado más grande del mundo para la comercialización de los dispositivos. Sin embargo, pese al entusiasmo de Balsillie y fuerte interés por parte de los fabricantes chinos, no se concretó nada.
Mike Laziridis, Co-CEO de Blackberry, manifestaron sentirse preocupados porque la oficialización del posible acuerdo, opacara y distrajera el mercado para el lanzamiento del BlackBerry 10. Lanzamiento que irónicamente, es señalado como uno de los grandes fracasos de la compañía y en la historia de los grandes competidores del smartphone.
En el plan se dice que este fue discutido internamente en RIM durante dos años antes de que finalmente fuera desechado por el nuevo CEO Thorsten Heins, quien tomó las riendas de la compañía.
Las ganancias de BlackBerry segundo trimestre hace dos semanas, reportaron ingresos trimestrales de $ 1,6 millones, menos de la mitad de los $ 3.06 bn que los analistas económicos esperaban, en parte gracias, al fracaso en ventas del BB 10.
Por lo pronto, Blackbery seguirá en el proceso de privatización y de redireccionamiento del mercado, gracias al acuerdo de los $ 4.7 mil millones; mientras que en China los fabricantes de teléfonos nacionales compiten a muerte por ganarse una porción del mercado dominado por el sistema Android, y liderado por Samsung y Apple.