Lida A. Arcila
Hablamos de la relación íntima entre la cotidianidad de los seres humanos y las cosas o entre los mismos objetos, y todas las aplicaciones que podían hacer seguimiento a la interacción que se deriva de la misma.
Con una operación tan simple como adaptar un pequeño chip en una persona u objeto y conectarlos a una red la actividad diaria de estos podría ser monitoreada, administrada o inventariada por los computadores para cumplir diversos propósitos de seguridad, de salud, comercial o diferentes aspectos de orden público o privado. Como es visto en la actualidad, especialmente en el medio del consumo en el que las grandes cadenas controlan el sus inventarios, una de las formas de identificación de objectos más comunes es el código de barras u otras etiquetas como QR o marcas digitales de agua.
Un escenario ajeno al marketing que viene implementando la tecnología de las cosas es el mercado de la iluminación. Un ejemplo lo tiene la compañía Lutron Electronics, especializada en soluciones para control de la energía, que en conjunto con otras empresas del sector creó una entidad nombrada Connected Lighting Alliance para ofrecer al mercado soluciones unificadas, inteligentes e inalámbricas que permitan la interoperabilidad entre dispositivos de distintas empresas.
El sistema Quantum, es la propuesta inicial que este grupo de “iluminados” están promoviendo para aplicaciones comerciales, que ofrece un control total y de la iluminación, cortinas, sistemas de refrigeración, aparatos de audio y videos y gastos energéticos para todo tipo de edificaciones residenciales o comerciales que con fácil instalación, flexibilidad y conveniencia, los usuarios podrán manejar omnipresentemente desde una computadora, un teléfono AndroidTM, iPhone®, iPod touch®, or iPad®.
Con la existencia de desarrollos integrados de iluminación, la industria busca además de desplazar los interruptores tradicionales, diseñar productos amigables con las tendencias del medio ambiente que economizarían hasta un 60% el consumo de energía y que serán compatibles con cualquier sistema operativo internacional.
De acuerdo con la firma de Mercadeo neoyorquina, ABI Reasearch para el 2020 habrán en internet más de 30 mil millones de dispositivos conectados entre sí y emitiendo datos en tiempo real.
El OIT como también le dicen “Internet de los objetos” esto gracias a las inmensas bondades de la red que poco a poco nos conducirá hacia la digitalización del planeta. No se sabe que traerá este nuevo mundo donde todo puede estar bajo control pero resulta fascinante y de gran utilidad si se sabe potencializar el poder de inventos en favor de los ciudadanos o las instituciones a partir de este diálogo continuo entre máquinas y hombres.