Corresponsal Centroamérica
Los sistemas aeroportuarios del mundo viven en una constante lucha frente a la imperante necesidad de ampliar sus capacidades operativas para ofrecer a los pasajeros la mejor calidad en el servicio, lo que se traduce en “llegar a donde van con el menor tiempo de espera posible”. Diariamente hay alrededor de 29 mil vuelos que despegan y aterrizan en los poco más de 9 mil aeropuertos que hay en el mundo, según datos de la Asociación Internacional de Transporte Aéreo según datos a agosto del 2022.
Actualmente los procesos dentro de los aeropuertos se han visto rebasados ante la afluencia de usuarios, por lo que estos suelen ser tediosos y tardados. El tiempo que transcurre desde la documentación del equipaje, hasta los filtros de migración y abordaje, podría ser cada vez menor con ayuda de la tecnología.
La solución tecnológica que ofrecen empresas como Axis, consiste en instalar un sistema de supervisión por video que pueda facilitar las operaciones aeroportuarias a largo plazo, disponer de imágenes de vigilancia de alta calidad de las aceras, las zonas de equipaje, el control de rayos X, los filtros migratorios, la zona de abordaje y la pista, con las cuales las analíticas de video especializadas puedan obtener datos relevantes que faciliten la operación y aumenten la eficacia operativa.
Con la avalancha de ofertas de inteligencia artificial y aprendizaje profundo que ingresan al mercado, algunos aeropuertos han aprovechado para adquirir datos de video con estas nuevas tecnologías de visión por computadora para comprender mejor lo que sucede en el entorno, como la ocupación de las salas y los tiempos de espera, al tiempo que puedan enviar notificaciones en tiempo real a los pasajeros que llegan o salen de las instalaciones.
Videovigilancia para la eficiencia operativa
También es posible adoptar herramientas de reconocimiento facial y otras tecnologías de análisis en zonas de acceso restringido para aumentar la agilidad en el aeropuerto al momento de realizar trámites migratorios sin necesidad de filtros manuales de revisión en diferentes puntos del recorrido de los pasajeros. Pero de igual manera, que sirvan para responder oportunamente a eventuales problemas de seguridad que se presenten. Así, el personal del aeropuerto puede utilizar las imágenes para identificar a los viajeros sospechosos y supervisar sus desplazamientos.
En las zonas de acceso exclusivo de empleados, los dispositivos de control de acceso pueden ser para permitir entradas y salidas ágiles, en beneficio de los tiempos de operación. “Estamos trabajando para convertir las imágenes en datos que ayuden en la toma de decisiones y la prestación de servicios, conocer los beneficios del control y monitoreo remoto, permite adaptar nuevas herramientas que den como resultado entornos más seguros e inteligentes, pero también implican mayor atención al cuidado hacia el personal encargado”, explica Leonardo Cossio, Key Account Manager de Axis Communications.
Las mismas cámaras instaladas pueden utilizarse para tareas tan sencillas como la de un pasajero que pierde el ticket del estacionamiento, el pasaporte o su pase de abordaje, con las cuales es posible seguir sus desplazamientos por el aeropuerto y determinar dónde lo ha perdido; hasta tareas que requieren supervisión de las autoridades locales competentes como los accesos de migración y los recorridos de los pasajeros con problemas migratorios o documentos incompletos.
Actualmente, también las tareas externas a los edificios aeroportuarios se desarrollan y monitorean con videovigilancia. Los despegues de los aviones se supervisan mediante cámaras de alta resolución que permiten incluso leer la matrícula de la aeronave y transmitir imágenes a la torre de control para facilitar la identificación visual al personal que gestiona los aterrizajes y despegues.
Otro de los usos de las analíticas incorporadas en las cámaras, es la medición del flujo de vehículos y el tiempo de permanencia en zonas determinadas, por ejemplo, la de carga y descarga, para que, de esta forma realizar estrategias que permitan determinar anticipadamente los momentos de saturación y así generar alertas ante las que el personal responsable del tráfico pueda reaccionar de forma proactiva.
Gracias a las imágenes en alta resolución, la capacidad de las cámaras de identificar los más pequeños detalles y las analíticas de video hoy es posible aumentar la agilidad de los procesos y disminuir el tiempo que los pasajeros pasan dentro de un aeropuerto.
